Hice el Check-out en Casa Pueblo, salude con abrazo a Daniel y a las 9 hs. partí hacia la terminal con rumbo a San Rafael. Luego de tres horas de viaje, aterrice en el hostel e hice el check-in en Trotamundos a las 13 horas, deje mis cosas en la habitación y me fui a almorzar. Después de las 14 horas todos duermen la siesta y los negocios están cerrados hasta las 17 hs., parecía una ciudad fantasma. Salí a caminar, encontré un lugar abierto y me comí una pizza con una cerveza luego me fui a recorrer un poco, llegue a la plaza San Martin que es una de las mejores plazas que vi en mi recorrido. La tarde estaba perdida con respecto a excursiones ya habían salido todos temprano hacia el Cañón del Atuel, no me quedaba otra que hacer un city tour por mi cuenta, la ciudad que ya tenía más pinta de pueblo a comparación de Capital era de paz y tranquilidad, no tiene mucho para ver pero la camine por completo para hacer un poco de tiempo hasta volver al hostel. Me di una ducha y ya había arreglado con el hostel para hacer la excursión del cañón para el otro día. En el hostel había una chica de Canadá, Mary Rose era diplomática canadiense, vivía en Capital Federal y trabajaba en la embajada, pero se vino a Mendoza por un tiempo para realizar un curso de castellano, y de paso aprovecho el finde para conocer el cañón, una mina muy copada y hablaba bastante bien el español. Esa misma noche ya había confianza con ella y con otros chicos que paraban ahí y llegada la noche me prepare unos ravioles con carne (esta vez no use salchichas aja) y cenamos todos juntos, con vino de por medio charlamos un rato y luego nos fuimos todos a dormir.
CAÑON DEL ATUEL
A las 9:30 me pasa a buscar la traffic para hacer el cañón, la excursión dura todo el día, dentro de la combi se puso interesante el viaje ya que había bastante confianza con otros viajeros y la pasamos bastante bien, había buena onda y predisposición para hacer del día una maravilla. La primera parada fue en el mirador de San Francisco de Asís, luego continuamos el viaje hasta llegar al dique El Nihuil, recorrimos y sacamos fotos, el dique está a sólo 73 Km. de San Rafael es la primera escala de un circuito que recorre los angostos caracoles del Cañón del Atuel hasta el Valle Grande para regresar de allí a la capital departamental. En la villa El Nihuil, paramos para almorzar para luego seguir el viaje ya metiéndonos al Cañón del Atuel para descubrir sus maravillosas esculturas naturales, entre ellas podemos ver, Los Jardines Colgantes, Los Monstruos, El Mendigo, Sillón de Rivadavia, Museo de Cera, La Ciudad Encantada, Los Viejos y El Lagarto, por mencionar solo a algunas de ellas. Los minerales y las piedras del Cañón hipnotizan y maravillan con sus formas. Mientras las combis hacen magia por los caracoles, entre los paredones del cañadón, las rocas aparecen y desaparecen a medida que seguimos el viaje y a cada paso nos siguen sorprendiendo hermosas figuras, nuestro guía no dejaba de preguntar siempre ¿a qué se parece esa piedra? Y todos teníamos que adivinar, creo que el guía hablo demasiado para mi gusto, me parece genial que explique todo pero lo peor es que “no paro de hablar nunca” incluso cuando nos volvíamos pensé que había terminado de contar todo, pero no, siguió hablando hasta más no poder como si recién hubiese empezado la excursión, la verdad me saco que quicio. También en el recorrido podemos ver dos lagos artificiales (Aisol y Tierras Blancas) que contribuyen a la belleza del paisaje, un paseo maravilloso que no pueden dejar de hacer, ir a San Rafael y no hacer el Cañón es un pecado!!!
Pero lo mejor estaba por llegar, en Valle Grande hicimos una parada y cada uno podía elegir una actividad, claro que todo el mundo quería hacer el maravilloso RAFTING !!!, el máximo de duración es de una hora, contratamos y todos con chalecos, remos y al agua !!!!!..una experiencia única, una maravilla, fascinante, no dejen de hacer el rafting si van al cañón, lo mejor de toda la excursión. Entre otras actividades podías hacer tirolesa, rapel, cabalgatas o bien podías quedarte en algún barcito a tomar algo. Hermosa manera de terminal el día, el grupo fue muy bueno, con Mary de Canadá, Ángel y Karina de Bs. As. que eran hermanos y que luego los volvería a encontrar en Malargue, todas ellas serán esas personas que uno jamás olvidara.
Llagamos al hostel y por la noche me fui hasta la terminal a despedir Mary que volvía a Mendoza Capital y de paso me saque los boletos para el día siguiente hacia Malargue donde pasaría varios días, lo mejor me estaba esperando. Todo parecía ir a la perfección con respecto al itinerario que había hecho, los días me acompañaban muy bien, pero sobre todo me sentí muy bien luego de varias experiencias como un viajero solitario, el destino más deseado me esperaba y según lo que había investigado las mejores excursiones me estaban esperando como así también nuevas caras de amigos y compañeros de viajes. Por el momento nada me había sorprendido, no fue como el norte que cada lugar conocido no dejaba de deslumbrarme, Mendoza es lindo, pero para mí lo mejor de todo está en Malargue, ahí si, La Payunia, Las cavernas y el volcán fue lo que me deslumbro por completo, pero en la siguiente entrada les cuento, ¿siguen mi viaje?, vamos.
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